LETANIA:
Salve Dominaciones Benditas
Santos Ángeles curadores
Nuestras almas de la oscuridad
Rediman
De toda confusión, libérennos
De la tristeza, rescátennos
De la soledad, salvaguárdennos
Nuestras vidas restauren
Nuestras heridas curen
Nuestras lágrimas consuelen
Santísimas dominaciones de todo peso libérennos
(Las Dominaciones cortan las ataduras con sus espadas)
Por el río del Olvido, condúzcannos
Para soltar las penas, auxiliemos
Amor concedemos
Justicia
Dispensamos
Valor confiáremos
Potentes dominaciones
Ángeles curadores
Los conjuro
Con sus remedios sagrados nuestra situación, sanen
Atiéndannos, (x3)
Vientos de menta y laurel gracias
Ahora nuestro cuerpo se cura y nuestra alma se sana (x3)
Benditos guerreros de la salud
Gracias amen
Las armas de las Dominaciones son las espadas y las hierbas mágicas.
Están a las órdenes de Rafael.
Los monjes plantas estas hierbas en la noche de Luna llena para curar el alma. Dibujan un círculo con surcos en la tierra y en medio una fogata, (se recibe la energía por medio del fuego: elemento sagrado, conductor de la energía de los ángeles). Cada surco que sale del centro simboliza un camino para curar una dolencia, tristeza, herida, etc. se plantan simbólicamente las semillas de los opuestos a los problemas: Ej: para la dispersión y la confusión, claridad y discernimiento; ego y tiranía, compromiso, compasión.
Se trabaja con las fuerzas contrarias que nos limitan, para alinearnos.
El Demonio de Asmodeo, que separa parejas, solo lo puede retirar Rafael, que según el Zohar, (libro hebreo del esplendor), es el encargado de curar la Tierra. Asmodeo simboliza el miedo que mata al amor, cuando esta a punto de ser concretado. Actúa para hacernos creer que clamor debe terminar y así no asumimos compromisos por falta de seguridad, entonces surge la tristeza que es el 8º pecado capital
Rafael nos enseña a celebrar la existencia, a pesar de las dificultades y a tener fe, nos muestra que estamos en peregrinación, en constante movimiento
A Rafael le podemos pedir la curación del cuerpo y el alma, liberándonos de las penas, un amor interminable, compañía, contacto fraternal que nos libre de la ceguera espiritual, dar un salto de conciencia desapegarnos
El arcángel Rafael y las Dominaciones curan las memorias genéticas que nos dañan
GRAN AKATISTHO DE RAFAEL: cura la desesperanza y recarga el corazòn de alegría y fe.
Salve Arcángel Rafael, Santo Peregrino
Bendito seas, ¡Óyeme!
En cuerpo y alma, ¡cúrame!
Borra mis tristezas, alégrame
Bendito seas Altísimo Príncipe Angélico, óyeme
El amor interminable y eterno concédeme
Toda desesperanza quítame
Fe confiada otórgame
Bendito seas, dulce ángel mío
Mensajero de Dios, óyeme
Bendito seas médico celestial, cúrame, límpiame purifícame, regenérame
De mis dudas y mezquindades rescátame
Tu Santa Certeza, concédeme
Bendito seas, compañero del camino
Por nuevos rumbos de Luz guíame
De los miedos propios y heredados, libérame
A mi total libertad, condúceme
Bendito seas, Guía de Claridad, óyeme
Bendito seas, guía de la Nueva Tierra Prometida, óyeme
En medio del gran cambio que estremece la Tierra, ampárame
Los recuerdos que me dañan, bórrame
Santísimo Arcángel, enséñame a nadar en el Río del olvido
Bendito Rafael, dame el don de la perpetua alegría
De tu transparente mirada y tu liviana soledad, Santo Peregrino, enséñame a agarrarme de Dios
Libérame, sáname, elévame
Bendito seas amen
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